El Fondo Verde para el Clima (Green Climate Fund, GCF) es un fondo global creado en respuesta al cambio climático y que invierte en un desarrollo con bajas emisiones y resiliente al clima. Presta especial consideración a las necesidades de los países en desarrollo que son particularmente vulnerables a los efectos del cambio climático. Suiza comparte una silla en el Consejo Directivo del Fondo Verde para el Clima junto con Finlandia, Hungría, Liechtenstein y Mónaco.
El Fondo Verde para el Clima fue adoptado en 2010 por las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Para el primer período de reposición de recursos 2020-23 más de 30 Estados anunciaron contribuciones de alrededor de 10.000 millones de dólares. El objetivo del fondo es apoyar de forma sustancial y ambiciosa los esfuerzos globales para combatir el cambio climático. Ayuda a los países en desarrollo a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y a adaptarse al cambio climático, considerando asimismo las necesidades de aquellos países en desarrollo que son particularmente vulnerables a los efectos del cambio climático. La mitad de los fondos del FVC se invertirán en medidas de adaptación.
El FVC financia acciones climáticas en países en desarrollo en los siguientes ámbitos:
En la asignación de los medios financieros, el fondo persigue un equilibrio entre la reducción de los gases de efecto invernadero (mitigación) y la adaptación a los efectos del cambio climático (adaptación). Además, el FVC promueve activamente el compromiso del sector privado a fin de proporcionar recursos financieros adicionales para los países en desarrollo.
Las actividades del FVC se desarrollan por medio de organismos acreditados a nivel internacional, regional, nacional y subnacional. La colaboración con las autoridades nacionales designadas permite asegurar la coherencia entre las solicitudes de financiación y las estrategias y prioridades nacionales.
El Fondo Verde para el Clima está gobernado por un Consejo Directivo de 24 miembros, en el que están representados por igual los países desarrollados y los países en desarrollo. Presidida por el Director Ejecutivo, la Secretaría independiente en Songdo (Corea del Sur) se encarga de la gestión cotidiana, mientras que el Consejo Directivo adopta las decisiones estratégicas y de financiamiento.
Suiza desempeñó un importante papel en la creación del FVC, en particular en la fase de concepción y constitución del fondo. En el período 2015-17 aportó una contribución a la capitalización inicial del fondo de 100 millones de dólares y aumentó su contribución a 150 millones de dólares en el marco de la primera reposición de recursos para los años 2020-23. Suiza está representada en el Consejo Directivo, donde comparte una silla junto con Finlandia, Hungría, Liechtenstein y Mónaco. La plataforma conjunta «PLAFICO» de la COSUDE, la SECO y la Oficina Federal de Medio Ambiente (OFEV) coordina el compromiso de Suiza con el Fondo Verde para el Clima. Suiza apoya los objetivos y los principios del fondo y persigue en particular los siguientes objetivos prioritarios:
Hasta finales de 2020, el Consejo Directivo del FVC asignó alrededor de 7300 millones de dólares a 160 planes de proyectos en más de 100 países con el propósito de reducir más de 1200 millones de toneladas de gases con efecto sobre el clima y que más de 400 millones de personas en todo el mundo gocen de una mayor resiliencia climática. Todos los planes de proyectos están publicados en la página web del FVC.
